tacto, tacto, soñar en la noche piedra, óvulo del día; la escalera y una estrella recién cortada una estrella que dobló la esquina. Tacto hacia la estatua y encontrar solo el aullido tacto hacia el eco, tocar la hebra olorosa querer y solo hallar la doble voz el muro. tacto tacto el muro se alza, se triza un espejo bailar sonámbulo y preñado de tu cuchara oral ser asesinado en medio del plié sacar, saciar, tacto tacto mirar la sangre como izada desde el centro; sombra perlada de la raíz, del húmero, del territorio. Tacto tacto hacia la estatua vestirla de ojos en un cerrar de barcos y cruceros. Acariciar todo el espacio como si estuviera lleno de herramientas y jugar a los dados cuando el hambre se asoma y pegar mi oído al centro de mi pecho para escuchar el latido cien mil una ostra de veces hasta oírlo decir “tocar tocar “estoy soñando en esta noche de piedra”